Zdero disparó contra gremios: ‘Tienen que justificar un sueldo sin trabajar, no agarrar una tiza hace 30 años’
En medio de las crecientes tensiones con el sector docente y en particular con los sindicatos, tras la suspensión del pago de la cláusula gatillo, el gobernador del Chaco, Leandro Zdero, justificó la medida en lo que definió una «crisis financiera heredada» y apuntó contra los gremios docentes por convocar a un paro.
En declaraciones públicas, el mandatario chaqueño fue tajante. «Mi compromiso es con los docentes, no con los gremialistas. No quiero poner a los docentes en el medio. Los gremios tienen que justificar sus tareas de no hacer nada, de ganar un sueldo sin trabajar, de no agarrar una tiza hace 30 años y de caminar la Sarmiento todos los días», y agregó: «en 30 años, nunca escuché a un gremialista discutir sobre calidad educativa, algo que con los docentes estamos abordando».
Zdero explicó que su gobierno se enfrenta a un desorden fiscal que limita las posibilidades de otorgar aumentos. En ese marco, afirmó que más del 100% de los ingresos por coparticipación están comprometidos en el pago de sueldos. «Este mes debemos afrontar una deuda de 40 millones de dólares», al tiempo que remarcó que su administración prioriza «el funcionamiento del sistema de salud, los servicios básicos y la transparencia en el uso de recursos». «Imagínense lo que podríamos hacer en obra pública con el dinero de la deuda, no solo dar aumentos, sino también incentivos para la radicación de industrias, que es el giro que buscamos para no depender solo de lo que llega de Buenos Aires», expresó.
El gobernador defendió su política salarial. Recordó que su gestión otorgó aumentos significativos en los primeros meses del año. «Dimos aumentos del 53% en enero, luego del 51%, y llegamos casi al 230%. Esto nos permitió pasar del puesto 21 o 18 al 6 en el país, algo que otros gobernadores cuestionaron». No obstante, reconoció que actualmente no puede sostener ese ritmo.
Asimismo, remarcó las prioridades de su administración ante la crítica situación financiera de la provincia. También apuntó contra sus antecesores, Jorge Capitanich y Domingo Peppo, a quienes acusó de haber dejado una provincia endeudada: «La plata se la robaban. Se la llevaban en bolsas los amigos y los piqueteros”, disparó.
Finalmente, frente al paro anunciado por los sindicatos, el gobernador fue tajante: «Van a trabajar ahora, porque es lo único que hacen: insinuar paros. Los docentes merecen respeto. Con ellos quiero construir una educación mejor. Con los gremios, no comparto nada».

