Un hombre se disfrazaba de su madre fallecida para seguir cobrando su pensión
Un caso tan insólito como macabro ha sacudido a la localidad de Borgo Virgilio, cerca de Mantua. Un hombre fue descubierto intentando hacerse pasar por su madre fallecida con el objetivo de continuar cobrando su pensión de viudedad y los ingresos provenientes de propiedades familiares. La situación salió a la luz cuando el individuo se presentó en el Registro Civil del municipio caracterizado como su progenitora, Graziella Dall’Oglio, quien tendría hoy 85 años.
El hombre —un enfermero desempleado— acudió a las oficinas municipales luciendo peluca de corte femenino, abundante maquillaje, una blusa estampada estilo setentista, pendientes de clip y un collar de perlas. Aunque a simple vista podía parecer una mujer mayor, los funcionarios notaron de inmediato inconsistencias en su apariencia y en la forma en que se comportaba.
La empleada que lo atendió alertó a sus superiores, quienes revisaron una fotografía tomada semanas antes en el Ayuntamiento y la compararon con el carnet de identidad caducado de la verdadera Dall’Oglio. Las similitudes existían, pero el engaño era evidente: la persona que estaba frente a ellos no podía ser la anciana viuda de un médico local.
Alertado el alcalde, Francesco Aporti, se notificó a la policía municipal. El hombre fue citado a una comisaría situada frente al edificio para completar la identificación. Allí, durante el interrogatorio, terminó confesando que era el hijo de la mujer, fallecida hacía varios años.
Hallazgo impactante
La confesión llevó a las autoridades a registrar la vivienda familiar. Al ingresar, encontraron el cuerpo momificado de Graziella Dall’Oglio en una habitación. Según las primeras hipótesis, el hijo habría utilizado sus conocimientos sanitarios para impedir la descomposición del cadáver y ocultar la muerte el mayor tiempo posible.
Fuentes locales señalan que el cuerpo podría llevar al menos tres años en la casa. La autopsia se realizará en el Hospital Carlo Poma de Mantua para determinar la fecha y causa precisa del fallecimiento, que preliminarmente se atribuye a causas naturales.
La investigación reveló que el hombre continuó cobrando la pensión de viudedad y las rentas de inmuebles familiares, sumando alrededor de 53.000 euros anuales, cifra que incluía beneficios del Instituto Nacional de la Seguridad Social italiano (INPS). Incluso habría firmado la declaración de la renta haciéndose pasar por su madre.
La Fiscalía de Mantua lo acusa ahora de ocultación de cadáver, suplantación de identidad, fraude al INPS y falsedad documental, delitos que podrían derivar en una condena de entre 3 y 10 años de prisión.
El caso ha generado conmoción en Italia por la mezcla de engaño, desesperación económica y manipulación del cuerpo de la anciana.
