Ucrania llevó a cabo un ataque al puente de Crimea utilizando bombas submarinas
Los servicios de inteligencia ucranianos colocaron 1100 kilogramos de explosivos bajo el agua.
El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) anunció el daño a los cimientos del puente de Kerch, que conecta Crimea con la Rusia continental, tras detonar 1100 kilogramos de explosivos en una operación especial.
«Esta operación se extendió por varios meses. Los agentes del SBU colocaron minas en los fundamentos de esta estructura ilegal y, sin que haya habido bajas civiles, a las 04:44 hora local, se activó el primer explosivo», comunicó el SBU.
Este es el tercer ataque ucraniano en contra de este puente, que fue construido por el presidente ruso, Vladimir Putin, tras la anexión de Crimea en 2014.
El SBU indicó que el puente de Crimea es un objetivo legítimo, al concebirse como una infraestructura que conecta un territorio ocupado de Ucrania y como un medio logístico para el suministro del Ejército ruso. «Crimea es Ucrania y cualquier señal de ocupación recibirá una respuesta firme», dijo Vasil Maliuk, jefe del SBU.
Además, el SBU ejecutó recientemente una de las operaciones más ambiciosas en territorio enemigo, atacando más de cuarenta aviones de combate rusos en varias bases aéreas, incluidos sitios en Siberia. El Estado Mayor ucraniano reportó la destrucción de 12 aviones rusos y daños a otros.
El presidente ucraniano Volodimir Zelenski calificó de «resultado brillante» esta operación, conocida como «Telaraña», en la que se utilizaron 117 drones.
Mientras los ataques continúan, Rusia y Ucrania acordaron intercambiar prisioneros de guerra menores de 25 años y heridos, así como la entrega de los cadáveres de soldados, durante negociaciones en Estambul que no lograron concretar un alto el fuego. El negociador ucraniano, Serguii Kislitsia, declaró que Rusia rechazó un alto el fuego incondicional. Por su parte, Rusia propuso un cese al fuego parcial de entre dos y tres días.
