Siete detenidos por el triple femicidio, pero “Pequeño J” sigue prófugo

La investigación por el asesinato de Brenda del Castillo (20), Morena Verdi (20) y Lara Gutiérrez (15) avanza con siete detenidos acusados de distintos grados de participación, aunque los investigadores todavía buscan a los presuntos cerebros de la banda narco: Tony Janzen Valverde, alias “Pequeño J”, y su mano derecha, Matías Ozorio.

Entre los apresados se encuentran el hombre que cavó la fosa donde fueron enterradas las víctimas, el chofer de la camioneta en la que las trasladaron, los propietarios de la vivienda donde hallaron los cuerpos y dos jóvenes que intentaban limpiar rastros de sangre en la escena. También se entregó una mujer que admitió haber viajado en el vehículo utilizado para el secuestro.

Los detenidos y sus roles en el caso:

• Ariel Giménez: señalado por cavar la fosa en la que aparecieron los cuerpos.

• Lázaro Víctor Sotacuro: chofer de la camioneta blanca, arrestado en Bolivia y alojado en Ezeiza.

• Miguel Ángel Villanueva Silva (25): dueño de la vivienda del barrio La Esperanza donde fueron hallados los cuerpos.

• Magalí Celeste González Guerrero (28): pareja de Villanueva, co-propietaria del inmueble.

• Daniela Iara Ibarra (19): sorprendida limpiando manchas de sangre.

• Maximiliano Andrés Parra (18): también acusado de encubrimiento por eliminar rastros en la casa.

• Florencia Ibáñez (30): sobrina de Sotacuro, se entregó voluntariamente y confesó haber estado en el vehículo.

Según la hipótesis judicial, las jóvenes habrían sido víctimas de un ajuste de cuentas ligado a una supuesta “mexicaneada” en una operación narco. Las autoridades sostienen que el objetivo principal no eran ellas, sino enviar un mensaje en el marco de una disputa entre bandas.

Sobre “Pequeño J” pesa una orden de captura nacional e internacional, mientras la causa continúa bajo secreto de sumario.