Show, política y tensiones: el polémico evento de Milei tras la salida de Espert
En un intento por revitalizar su campaña y recuperar el control político tras la salida de José Luis Espert de la lista bonaerense, el presidente Javier Milei encabezó anoche un evento en el Movistar Arena que combinó música, discurso político y espectáculo. La presentación de su nuevo libro, La construcción del milagro, se transformó en un show cargado de simbolismo y mensajes dirigidos a sus seguidores y detractores.
El mandatario irrumpió en escena con su ya clásico estilo rockero, interpretando “Panic Show” y otros temas emblemáticos. Luego, vestido de traje, ofreció un discurso en el que prometió “reformas estructurales tras el 10 de diciembre” y aseguró que “la inflación se terminará a mitad de 2026”.
Durante la noche, Milei alternó entre canciones y declaraciones políticas. Criticó al kirchnerismo, defendió su gestión económica y agradeció al “triángulo de hierro” conformado por su hermana Karina, el asesor Santiago Caputo y su círculo más cercano. “Pueden haber ganado un round, pero no la batalla”, advirtió a la oposición, mientras el público coreaba consignas libertarias.
Entre los presentes se encontraban los ministros Patricia Bullrich, Luis Petri, Sandra Pettovello y Martín Menem, además de Diego Santilli, quien reemplazará a Espert en la boleta bonaerense. El presidente abrazó al diputado y destacó su incorporación como una señal de unidad.
Fuera del estadio, el clima fue tenso: hubo enfrentamientos entre militantes libertarios y grupos opositores, así como incidentes con la policía. Varias personas resultaron demoradas.
El evento concluyó con Milei entonando “Hava Nagila” y “Libre” de Nino Bravo, tras rendir homenaje a las víctimas del terrorismo y reivindicar su apoyo a Israel. En las pantallas se proyectaron imágenes históricas y mensajes alusivos a la “batalla cultural”.
Con este acto, el mandatario buscó mostrar fortaleza en un momento de fragilidad interna, marcado por tensiones en su coalición y negociaciones económicas en Washington encabezadas por el ministro Luis Caputo. En un escenario político incierto, el presidente apeló a su estilo más performático para reconectar con su base y sostener el relato de “resistencia libertaria” rumbo a las elecciones de medio término.
