Sarampión: Chile refuerza controles y cuestiona la caída de la vacunación en Argentina
El Gobierno de Chile anunció este lunes la emisión de una alerta epidemiológica por sarampión, motivada por el incremento de casos registrados en Argentina y por la preocupación creciente ante la baja cobertura de vacunación en la región. La ministra de la Secretaría General de Gobierno, Camila Vallejo Dowling, encabezó el mensaje oficial e instó a la población chilena a vacunarse sin demora.
“El llamado es claro: no caer en las campañas antivacunas ni en la desinformación”, expresó Vallejo en conferencia de prensa. La funcionaria remarcó que la aparición de nuevos casos en Argentina —evento que las autoridades chilenas siguen con atención— obliga a intensificar los controles sanitarios y reforzar la vigilancia epidemiológica para evitar la reintroducción del virus en su territorio.
Vallejo subrayó que el incremento de la enfermedad en el país vecino está vinculado a la caída sostenida de la cobertura de la vacuna triple viral, que protege contra sarampión, rubéola y paperas. En este contexto, Chile decidió fortalecer su estrategia preventiva mediante una campaña ampliada de vacunación y un monitoreo más estricto en pasos fronterizos y centros de salud.
La ministra también cuestionó la expansión de discursos que desalientan la inmunización: “La desinformación, muchas veces impulsada incluso desde autoridades sanitarias de otros países, genera efectos graves en la salud pública. No podemos permitir que eso afecte la vida de las personas”.
La preocupación regional no es nueva. Organismos como la Organización Panamericana de la Salud (OPS) vienen alertando por la baja adherencia a la vacunación en Argentina: en 2024, la primera dosis de la antisarampionosa alcanzó solo el 82,1%, mientras que la segunda dosis —obligatoria a los 5 años— cayó a un preocupante 46,37%, muy lejos del 94% que se había logrado en 2022.
En paralelo, los reportes oficiales indican que, hasta noviembre, Argentina acumuló más de 3.100 notificaciones de sarampión en 40 semanas epidemiológicas, aunque solo 35 fueron casos confirmados. La situación se volvió más delicada tras conocerse que cuatro integrantes de una misma familia ingresaron al país con la enfermedad, después de haber viajado a Bolivia y de desplazarse por Argentina en tres micros que pasaron por Retiro. Las autoridades ya trabajan en la reconstrucción de ese recorrido para ubicar a posibles contactos.
Con este escenario, Chile busca blindarse ante una enfermedad altamente contagiosa que había sido eliminada de la región, pero que ahora vuelve a expandirse debido a la caída de la vacunación. El Gobierno chileno insiste en que la prevención depende esencialmente de un mensaje: vacunarse salva vidas.

