Reforma laboral: el Gobierno mantiene indemnizaciones y apunta a convenios por empresa
El Gobierno avanza con una amplia reforma laboral que, según fuentes del Consejo de Mayo, mantiene la indemnización por despido equivalente a un mes por año trabajado, pero introduce cambios estructurales en los convenios colectivos, los salarios y el derecho de huelga. La iniciativa, elaborada por el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, y el equipo de la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, sería presentada en el Congreso a mediados de diciembre.
El proyecto no contempla un tope máximo de indemnización, aunque sí mantiene límites sobre la base salarial para el cálculo, como ya ocurre actualmente. “No hay perjuicio al trabajador”, aseguraron desde el Consejo, desmintiendo versiones sobre un supuesto techo de diez sueldos.
Entre los puntos más relevantes se destaca la prioridad de los convenios por empresa sobre los de actividad, lo que otorga mayor autonomía a las compañías para negociar directamente con sus empleados y reduce el poder centralizado de los sindicatos. También se limita la “ultraactividad” de los convenios, de modo que ciertas cláusulas dejarán de regir una vez vencidos los acuerdos.
Otro de los ejes es la implementación de salarios dinámicos o variables, vinculados al rendimiento individual, la productividad o la situación económica de la empresa. Según el Gobierno, esta medida busca alinear los ingresos con los resultados y fomentar la formalidad, especialmente en pequeñas y medianas empresas.
La reforma también incluye la reglamentación del derecho de huelga en sectores esenciales, fijando niveles mínimos de cobertura (75% en servicios críticos y 50% en los trascendentales). Además, limitará las cuotas solidarias sindicales, que hoy se descuentan a todos los trabajadores de una actividad, estén o no afiliados, salvo consentimiento expreso.
El texto aclara el ámbito de aplicación de la Ley de Contrato de Trabajo, excluyendo la administración pública, el empleo doméstico, el trabajo agrario y las contrataciones por plataformas digitales. A su vez, propone la creación de una Agencia de Registro Laboral unificada, orientada a simplificar trámites y reducir costos para las empresas.
En materia de jornada laboral, se introduce el banco de horas y la posibilidad de computar promedios semanales, con el fin de adaptar la producción a las necesidades del mercado. También se prevé mayor flexibilidad en las vacaciones y un nuevo esquema de licencias médicas, donde los empleadores abonarán sumas no remunerativas durante las ausencias por enfermedad o accidente.
Finalmente, la reforma incorpora un capítulo sobre formación profesional y capacitación continua, para actualizar las competencias de los trabajadores frente a los cambios tecnológicos.
La CGT ya anticipó su rechazo al proyecto por considerar que vulnera derechos adquiridos y debilita el poder sindical. Pese a ello, el Gobierno insiste en que los cambios son necesarios para “modernizar el mercado laboral y generar empleo formal y competitivo”.
Fuente: Infobae

