Nos tapó el agua
Tristeza y desazón es lo que se ve en Resistencia, Barranqueras, Vilelas, Fontana, Tirol y otras tantas localidades que padecen la furia de la naturaleza, el desinterés de la sociedad y la desidia de la clase política.
-De la Redacción
De milagro, en la provincia no se registraron muertes a causa del temporal, pero son miles los chaqueños que debieron salir de sus hogares por la estampida del agua.
Se viralizaron además videos, cientos de videos, que muestran las penurias de los chaqueños, pero también otros que muestran, por ejemplo, que no todas las estaciones de bombeo funcionan correctamente.
En las mismas se aprecian lugares vacíos, declaraciones de empleados que cuentan porque no funcionan algunas máquinas y la vergüenza de conocerse que algunas no lo hicieron a pleno por falta de luz.
O sea, en una provincia y una región rodeada de ríos, uno de los grandes problemas fue que las estaciones de bombeo no funcionario como corresponde, y peor aún, muchas bombas están en perfecto estado, pero al no haber luz de Secheep no podían encenderse. ¿Cuesta de abastecer de grupos electrógenos a las mismas?
Primero Capitanich y luego Azula empezaron a sacarse el lazo, y a decir que les cabe responsabilidad, pero que el principal problema es de la provincia, y particularmente de APA.
De hecho, el gobernador le dio tácitamente la razón ya que anunció que van a comprar las bombas que faltan en Barranqueras, y que Azula asegura viene reclamando hace muchos años.
Hace poco menos de un año, Sáenz Peña vivió una situación similar y hoy, cuando todas las localidades estaban complicadas, la comuna mostraba casi como sobrando la situación que sus bombas funcionan a la perfección. También, más allá de lo arrogante que parece, puede verse como que aprendieron la lección.
Queda claro que esta situación es en primer medida a causa de la naturaleza. Pero Peppo saldrá muy lastimado. Poco importa que haya puesto fin a sus vacaciones, la gente lo abucheó en cada lugar que se presentó y el malestar social es gigante, con cortes de calle, enfrentamientos con la policía y entre vecinos, en una mezcla donde cuesta entender quien tiene razón.
Ojalá la provincia, como lo pudo haber hecho Sáenz Peña, aprenda de una vez por todas la lección, que se realicen las obras que deben realizarse y que de una vez por todas los chaqueños dejen de vivir, como vulgarmente se dice, con el Jesús en la boca.

