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Milei posterga los anuncios sobre el Gabinete y analiza cambios clave en el Gobierno

Tras la contundente victoria electoral de La Libertad Avanza, el presidente Javier Milei decidió demorar los anuncios sobre la reestructuración del Gabinete, priorizando un clima de optimismo en los mercados financieros, que reaccionaron con subas de bonos y acciones. “Es tiempo para que fluya el optimismo de la victoria”, explicaron desde la Casa Rosada, donde todavía se evalúan nombres y funciones para la nueva etapa.

El mandatario busca consolidar un acuerdo político con gobernadores y legisladores, con el foco puesto en las reformas estructurales que pretende impulsar en 2026. “El Gabinete se va a construir a la luz del nuevo Congreso. Lo importante son las reformas, el instrumento es el nuevo Gabinete”, dijo Milei en diálogo con A24.

Entre las modificaciones más probables figura la salida de Patricia Bullrich del Ministerio de Seguridad, ya que fue electa senadora por la Ciudad de Buenos Aires. La funcionaria habría pedido que su reemplazo sea Alejandra Monteoliva, actual secretaria de Seguridad.

El Ministerio de Justicia también atraviesa una etapa de redefinición. Su titular, Mariano Cúneo Libarona, confirmó que renunciará esta semana. Sin embargo, el “caputismo” —el sector alineado al asesor presidencial Santiago Caputo— seguirá teniendo peso político a través del secretario de Justicia, Sebastián Amerio, quien podría ascender o mantener su influencia bajo un nuevo ministro.

Otra incógnita es la conducción del Ministerio de Defensa, donde aún no hay reemplazante confirmado para Luis Petri. Dentro del Gobierno no se descarta que el cargo sea una moneda de negociación con el PRO, aunque Milei insistió en que la decisión será tomada “en conjunto” con el actual ministro.

La secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, resultó una de las grandes ganadoras dentro del oficialismo tras las elecciones. Su rol en la consolidación del aparato político libertario fortaleció su influencia, y no se descarta que decida mantener a Manuel Adorni en el Gabinete, pese a haber sido electo legislador porteño, para que actúe como representante de su entorno.

El presidente también revalorizó la tarea del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien parecía tener salida inminente. “Veremos cómo queda todo con el nuevo Gabinete”, afirmó Milei, sin confirmar ni desmentir su continuidad.

Durante el discurso de la victoria, los gestos no pasaron inadvertidos: mientras Francos permaneció fuera del escenario, Santiago Caputo y Adorni —los nombres que más suenan para su reemplazo— estuvieron a su lado.

Milei ratificó que su círculo más cercano, integrado por Karina Milei, Santiago Caputo y él mismo, seguirá intacto. “No va a cambiar eso”, aseguró.

En cuanto al frente económico, el presidente confirmó su respaldo al ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, quien se mantiene como una pieza central del esquema libertario. Su influencia se amplía con la designación de Pablo Quirno —mano derecha de Caputo— como nuevo canciller, lo que refuerza el control del equipo económico sobre la política exterior.

El Gobierno decidió no alterar la agenda mediática con anuncios inmediatos para no interferir en el impulso positivo de los mercados financieros tras el resultado electoral. La principal consultora porteña, 1816, evitó mencionar los cambios de Gabinete en su análisis postelectoral, concentrándose en las señales del equipo económico sobre el rumbo cambiario y monetario.

En definitiva, Milei buscará aprovechar el respaldo político obtenido en 16 provincias para fortalecer su posición frente a la oposición y preparar una nueva etapa de gestión, donde la economía y la negociación política con el Congreso serán los ejes principales.

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