Milei confirmó gestiones con Reino Unido para levantar el veto a la venta de armas a Argentina
El presidente Javier Milei aseguró al diario británico The Telegraph que mantiene conversaciones con el Reino Unido para avanzar en un posible levantamiento del veto que impide a la Argentina adquirir equipamiento militar británico desde la posguerra de Malvinas. El mandatario remarcó que “no hay potencias sin poder militar” y reafirmó que “de ninguna manera renunciaría a un territorio”.
La normativa vigente en el Reino Unido obliga a rechazar licencias de exportación que puedan fortalecer la capacidad militar argentina, restricción que Milei busca modificar en el marco de un acercamiento político y diplomático. Aunque autoridades británicas negaron negociaciones concretas sobre el tema, el medio londinense mencionó fuentes que reconocen diálogos bilaterales en asuntos de defensa.
El presidente también reveló que planea viajar a Londres en 2026 y realizar una visita oficial entre abril y mayo, con encuentros previstos con el primer ministro Keir Starmer y figuras de la oposición, como Nigel Farage. De concretarse, sería la primera visita de un presidente argentino al Reino Unido en casi tres décadas.
En la entrevista, Milei afirmó que la recuperación de las Islas Malvinas debe encararse mediante vías diplomáticas y vínculos comerciales maduros. Destacó además el rol de Estados Unidos —y de Donald Trump en particular— dentro del esquema geopolítico que el gobierno imagina para América.
Downing Street, por su parte, insistió en que la soberanía de las islas “no es negociable” y recordó el referéndum de 2013, cuando los habitantes ratificaron su pertenencia al Reino Unido. Voces militares británicas también advirtieron preocupación por una eventual modernización del arsenal argentino.
Modernización militar y la llegada de los F-16
El diálogo divulgado por The Telegraph se produjo días después de la presentación de los primeros F-16 Fighting Falcon adquiridos a Dinamarca, en una operación aprobada por Estados Unidos y valuada en US$ 301 millones. Según el Gobierno, se trata de la compra militar más importante desde el regreso de la democracia y permitirá a la Fuerza Aeronáutica recuperar capacidad supersónica.
La adquisición incluye aviones, motores adicionales, repuestos, soporte técnico y simuladores, y forma parte del plan oficial de reequipamiento de las Fuerzas Armadas.

