Malestar en los bancos por nuevas restricciones del BCRA

El Banco Central (BCRA) sorprendió nuevamente al sistema financiero con la publicación de la Comunicación “A” 8311, que establece mayores limitaciones a las entidades con el objetivo de contener la presión sobre el dólar en la previa de las elecciones. La medida, que comenzó a regir este viernes, generó un fuerte rechazo en la banca, donde advierten que la “imprevisibilidad total” de las regulaciones complica la planificación y provoca pérdidas.

Uno de los cambios más sensibles establece que las entidades no podrán aumentar su posición neta negativa en moneda extranjera en el último día hábil del mes, una operatoria habitual en el mercado. Con esto, el BCRA busca frenar las posiciones “sintéticas” que los bancos utilizaban en los cierres mensuales, vinculadas a contratos de dólar futuro.

En la city señalan que la decisión responde a la necesidad de maquillar la posición vendida del Central, que llegó a los u$s6.100 millones en futuros, apenas u$s2.800 millones por debajo del límite permitido. El jueves, de hecho, el mercado alcanzó un récord de interés abierto de u$s7.949 millones, el nivel más alto desde al menos 2020.

El malestar de los bancos no es nuevo: semanas atrás ya habían manifestado sus quejas en reuniones con autoridades de la entidad, entre ellas con el propio presidente del BCRA, Santiago Bausili. El principal reclamo es la constante modificación en las normas de encajes, que en agosto cambiaron tres veces. La última disposición dispuso una suba de 3,5 puntos porcentuales en los encajes remunerados, aunque con posibilidad de integrarlos con letras TAMAR emitidas por el Tesoro.

Los banqueros sostienen que la sucesión de medidas erosiona la rentabilidad y genera incertidumbre operativa. Mientras tanto, desde el BCRA justifican los cambios como parte de una estrategia para ordenar la liquidez y reducir presiones cambiarias, en un escenario político y económico cada vez más delicado.

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