La CGT debate si se suma al Consejo de Mayo
La conducción de la CGT analizará el lunes si acepta participar del Consejo de Mayo, la mesa de diálogo convocada por el Gobierno para avanzar en una “modernización laboral”. La disyuntiva aparece en medio de una fuerte interna sindical y frente al dilema de negociar o quedar afuera del debate sobre reformas clave.
El oficialismo incluyó a Gerardo Martínez, titular de la UOCRA, entre los representantes gremiales invitados al primer encuentro del Consejo, que se realizará el martes en la Casa Rosada. Martínez, que acaba de regresar del congreso de la OIT, afirmó que no fue notificado oficialmente pero que deberá “consultar con el resto de la CGT” antes de aceptar.
La mesa chica de la central obrera, donde predominan los sectores dialoguistas, podría avalar la participación. Sin embargo, en el Consejo Directivo hay dirigentes más cercanos al kirchnerismo, que rechazan cualquier conversación con el Gobierno mientras sigan vigentes el ajuste y las restricciones a las paritarias.
Desde el entorno del sindicalista remarcan que la invitación al Consejo podría ser una oportunidad para debatir reformas antes de que se impongan sin consenso. Pero también reconocen que sentarse a negociar en este contexto político puede generar tensiones internas, sobre todo con el Frente de Lucha que se movilizará la próxima semana.
Además, Martínez mantiene conversaciones con la nueva conducción de la UIA, encabezada por Martín Rappallini, con la intención de elaborar una agenda común que defienda los derechos laborales. Ambas partes comparten el rechazo a ciertas propuestas oficiales, como eliminar la ultraactividad o descentralizar las paritarias.
La CGT deberá decidir entre incidir desde adentro o resistir desde afuera. Sea cual sea la postura que adopte, la definición marcará el rumbo del sindicalismo en medio de una de las discusiones más importantes del año.
