Inédita intervención del Tesoro de EE.UU. agita el mercado del dólar
El ingreso del Tesoro de Estados Unidos al mercado cambiario argentino sorprendió a la city porteña y dejó más preguntas que certezas. La maniobra, ejecutada el jueves pasado a través del Banco Santander, marcó la primera vez en la historia que Washington compra pesos argentinos en el Mercado Libre de Cambios (MLC). La operación coincidió con el viaje del ministro Luis Caputo a Washington y forma parte del salvataje financiero que incluiría un swap por USD 20.000 millones.
Aunque el monto exacto de la intervención no fue confirmado, distintas fuentes estiman que pudo oscilar entre USD 24 millones y USD 200 millones. Analistas del bróker PPI calcularon que, por movimientos en las reservas del Banco Central, el flujo vendedor del Tesoro estadounidense habría rondado los USD 203 millones, aunque los datos oficiales recién se conocerán con los informes del Exchange Stabilization Fund.
Desde 1996, Estados Unidos solo intervino tres veces en mercados de divisas extranjeros: en 1998 con el yen japonés, en 2000 con el euro, y en 2011 tras el terremoto en Japón. Por eso, la operación en Argentina es considerada una medida excepcional.
El analista Christian Buteler explicó que no se trató de una línea de crédito, sino de una acción puntual para cambiar expectativas en medio de versiones sobre la insostenibilidad del régimen de bandas cambiarias. A su vez, Andrés Reschini (F2 Soluciones Financieras) señaló que el apoyo de EE.UU. busca mostrar un respaldo “sin precedentes” a la estrategia económica del Gobierno, mientras que Eric Paniagua interpretó la falta de precisiones como una jugada deliberada: “El margen de ambigüedad genera estabilidad si el mercado interpreta apoyo continuo”.
Por su parte, Luis Caputo aseguró que el Tesoro norteamericano “está dispuesto a seguir comprando pesos e intervenir también en futuros y bonos”, al tiempo que descartó cualquier plan de dolarización o convertibilidad. Según el ministro, la movida refleja una confianza en el esquema actual y en la conducción económica argentina.


