Sociedad 

Indignación por la desaparición de Acaí, la yaguareté símbolo del Impenetrable

Profunda consternación y enojo causó la desaparición de Acaí, la yaguareté hembra recientemente liberada en el Parque Nacional El Impenetrable, en Chaco. Considerada un símbolo de esperanza para la recuperación del mayor felino de América en territorio argentino, su pérdida representa un duro golpe para los esfuerzos de conservación.

Según informó la Administración de Parques Nacionales (APN), el 25 de octubre se registró la última señal del collar satelital que permitía monitorear los movimientos de Acaí. Días más tarde, el dispositivo fue hallado sumergido en el río Bermejo, en condiciones que sugieren una intervención humana intencional. Desde entonces, no se ha vuelto a tener rastro de la yaguareté.

Las primeras pericias apuntan a que el hecho no fue accidental. Organizaciones ambientalistas y defensores de la fauna sostienen que podría tratarse de un acto de caza furtiva o sabotaje, lo que reaviva el debate sobre la falta de control y las débiles sanciones ante los delitos ambientales.

Acaí era una de las yaguaretés reintroducidas como parte del programa de recuperación del Parque Nacional El Impenetrable, un proyecto conjunto entre Parques Nacionales, la Fundación Rewilding Argentina y el gobierno del Chaco. Su liberación había sido celebrada como un hito histórico en la conservación del felino más amenazado del país, cuya población estimada no supera los 250 ejemplares en todo el territorio nacional.

La posible muerte de Acaí pone en evidencia la vulnerabilidad extrema del yaguareté en Argentina. A pesar de los programas de cría y reintroducción, la especie enfrenta un escenario crítico por la pérdida de hábitat, la caza furtiva y la falta de aplicación efectiva de la ley de fauna.

Diversas organizaciones y especialistas reclaman una reforma urgente de la legislación vigente, con sanciones más severas y recursos destinados a la vigilancia ambiental. También exigen que se identifique y castigue a los responsables del ataque, advirtiendo que sin justicia, los proyectos de conservación quedarán en riesgo.

“Acaí no es solo un animal. Es el símbolo de una lucha por la vida, la libertad y el futuro del yaguareté. Su desaparición debe ser un punto de inflexión”, expresaron desde Rewilding Argentina en un comunicado.

La pérdida de Acaí no solo conmueve por lo que representa, sino porque refleja una deuda ambiental profunda: la incapacidad del país para garantizar la protección efectiva de su fauna autóctona. Su historia se convierte en un grito urgente por acción, justicia y compromiso real.

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