El Gobierno negocia un REPO por u$s2.000 millones
El Gobierno nacional avanza en la negociación de un préstamo REPO por u$s2.000 millones con un consorcio de bancos internacionales, con el objetivo de afrontar los vencimientos de deuda previstos para el 9 de enero, que rondan los u$s4.300 millones. La operación se aceleró ante la demora del Fondo Monetario Internacional en la revisión de fin de año y el desembolso pendiente.
Según fuentes oficiales, el acuerdo se encuentra en su etapa final y tendría características similares a los REPO utilizados a comienzos de 2025. El crédito se estructuraría a uno o dos años, con bonos soberanos como garantía, y los fondos ingresarían como reservas brutas al Banco Central, permitiendo aliviar el panorama financiero del inicio de año.
Desde el Ministerio de Economía explican que el mecanismo busca reforzar las reservas del BCRA y reducir tensiones en un contexto de reservas netas negativas y un riesgo país cercano a los 600 puntos. En ese marco, el préstamo funcionaría como una herramienta preventiva frente al “muro” de vencimientos y la estacional presión cambiaria de fin de año.
El esquema REPO implica una recompra obligatoria con tasa variable, usualmente atada a la SOFR más un spread. En el mercado se especula con un costo elevado, aunque desde el Palacio de Hacienda sostienen que sería más barato que una colocación en el mercado voluntario y que no responde a una urgencia de caja.
Tanto el presidente Javier Milei como el ministro Luis Caputo reiteraron en los últimos días que el Gobierno cuenta con los fondos necesarios para cumplir con los pagos del primer trimestre de 2026. En ese sentido, fuentes oficiales remarcan que la operación apunta a ganar margen financiero y bajar el riesgo país, más que a cubrir un faltante inmediato.
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