“Crisis sanitaria” en el principal hospital pediátrico del país: trabajadores del Garrahan se declaran en paro

El jueves próximo, se dirigirán al Ministerio de Salud para solicitar mejoras en las condiciones laborales y aumentos en sus salarios.

En el contexto de una agenda presidencial marcada por cuestiones sanitarias, los trabajadores del Hospital Garrahan, el principal centro de atención pediátrica del país, han decidido llevar a cabo un paro el jueves 29 de mayo, día en que presentarán sus demandas al Ministerio de Salud. La decisión fue tomada en una asamblea en el Aula Magna, donde el personal de planta acordó, por unanimidad, sumarse al paro que ya llevaban a cabo los residentes desde el lunes. A sus demandas de mejoras en las condiciones laborales, que incluyen la necesidad de insumos y personal adicional, los trabajadores del hospital pediátrico también exigen un aumento salarial, ya que los residentes afirman que ganan $797.061 por más de 60 horas semanales de trabajo.

Además del cese de actividades en el Garrahan, que solo mantendrá los servicios de emergencia, el personal se movilizará a las 13 horas del jueves hacia el edificio del Ministerio de Salud. El organismo ha reducido la plantilla de trabajadores, despidiendo a 1.400 personas en distintos cargos durante la primera quincena de enero de 2025.

“El personal de planta no se suma solo por solidarizarse, sino porque también estamos pasando por la misma situación. Un enfermero con 10 años en el principal hospital pediátrico del país no llega a los $900.000”, comunicó Alejandro Lipcovich, trabajador del Garrahan y secretario general interno de ATE, quien señaló que “sufrimos un éxodo de personal, incluidos profesionales altamente calificados, lo que afecta las capacidades de atención de este hospital modelo”. Por otro lado, las autoridades del hospital han solicitado una medida cautelar urgente ante el Juzgado Civil y Comercial Federal N°6 para que los médicos residentes reanuden sus tareas habituales y guardias, justificando que existe un “riesgo inminente para la salud de sus pacientes”.

La Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan ha presentado una denuncia penal contra las autoridades del establecimiento por “incumplimiento de deberes y abandono de pacientes”. El gremio advirtió sobre una “crisis sanitaria” en la institución, caracterizada por la falta de personal y condiciones laborales “deterioradas”.

La secretaria general de APyT, Norma Lezana, nutrisionista pediátrica, indicó que la situación en el hospital ha alcanzado un “punto crítico”. “Se vivió una escena de angustia frente a la Dirección del hospital. Jefes de distintos sectores se concentraron para exigir respuestas ante la falta de cobertura de guardias en más de 500 camas del hospital. Este conflicto se originó por la escasez de profesionales, que ha empeorado desde que asumió el Presidente Javier Milei”, manifestó.

En los últimos meses, más de 200 trabajadores han renunciado “sin ser reemplazados”. Según Lezana, la situación se complica “por el paro indefinido del personal de médicos residentes”, quienes son parte “esencial” del equipo de salud y “no alcanzan a ganar 750 mil pesos”. “Son salarios miserables inéditos en los 37 años de historia de Garrahan”, aseveró la secretaria general de APyT.

Este martes, se llevó a cabo una asamblea en el auditorio del hospital, donde participaron residentes, becarios, personal de planta, técnicos, administrativos y jerárquicos, en la que se definieron nuevas medidas y se decretó otro paro para el jueves.

Asimismo, el viernes 30 de mayo a las 15 horas se realizará una audiencia pública en el Congreso de la Nación para “interpelar a diputados y senadores de todos los espacios políticos”, con el fin de “exigir un compromiso legislativo que garantice el funcionamiento y financiamiento estable” del Hospital Garrahan, a través de una “ley específica”.

“Las autoridades del hospital respondieron con una nota institucional pidiendo a los jefes que elaboren un plan de contingencia para mantener la atención, lo que significa que, además de salarios bajos, se les exige a los profesionales que trabajen más allá de su jornada habitual, sin tener en cuenta sus responsabilidades familiares ni su calidad de vida; considerando también que la jornada mínima en el Garrahan es extendida, como se acordó desde su creación para ofrecer atención de calidad interdisciplinaria y sin pluriempleo. Hoy esta situación ya es insostenible”, concluyó Lezana.