Cerraron los comicios en Jujuy y Salta, en un clima de gran expectativa política y con denuncias por ‘clientelismo’
Este domingo, la provincia de Jujuy celebró elecciones legislativas en un clima de creciente expectativa política. Los comicios, que cerraron a las 18 horas con normalidad y una participación moderada del electorado, pusieron en juego la renovación parcial de la Legislatura provincial. La atención estuvo centrada en el enfrentamiento entre el oficialismo local, encabezado por el gobernador Carlos Sadir, y La Libertad Avanza, que compitió por primera vez con sello propio en la provincia norteña.
El oficialismo provincial, que responde al actual mandatario radical, presentó como primer candidato a diputado a Adriano Morone, quien busca renovar su banca y fortalecer la continuidad del espacio en el poder. Morone es un dirigente con trayectoria dentro del Frente Cambia Jujuy, alianza que dominó la política jujeña en los últimos años bajo el liderazgo de Gerardo Morales, ahora expresidente de la UCR nacional. El oficialismo apuesta a retener su predominio en la Legislatura para garantizar la gobernabilidad y profundizar el modelo de gestión iniciado en 2015.
Por su parte, La Libertad Avanza, el espacio político que lidera a nivel nacional el presidente Javier Milei, se presentó con Kevin Ballesty como cabeza de lista. Ballesty es un joven economista que ganó notoriedad en redes sociales y espacios de difusión libertaria. Su candidatura busca capitalizar el descontento de una parte del electorado con los partidos tradicionales y abrirle la puerta a una nueva generación de dirigentes alineados con las ideas de la libertad económica, la desregulación del Estado y la baja de impuestos. En Jujuy, esta elección significó una primera prueba para medir el arraigo territorial del movimiento libertario más allá del Área Metropolitana de Buenos Aires.
La jornada transcurrió sin incidentes relevantes, aunque se registraron algunas demoras en el inicio de la votación en zonas rurales por cuestiones logísticas. Desde el Tribunal Electoral destacaron el normal desarrollo del proceso democrático. A lo largo del día, tanto desde el oficialismo como desde La Libertad Avanza se difundieron mensajes convocando a la participación y asegurando transparencia en el conteo.
Más allá de los nombres en disputa, esta elección es observada a nivel nacional como un termómetro político en medio de un escenario de reconfiguración partidaria. Jujuy, históricamente dominada por el peronismo hasta la irrupción de Morales, se ha convertido en un bastión radical en la última década. Sin embargo, el surgimiento de fuerzas como La Libertad Avanza podría modificar los equilibrios en la Legislatura y forzar nuevas alianzas a futuro.
Los resultados oficiales se conocerán en las próximas horas. Los ojos de la política nacional están puestos en esta elección, que podría anticipar el humor social de cara a las elecciones de medio término y marcar el pulso de la expansión territorial del proyecto libertario en el norte argentino.
Elecciones en Salta: Sáenz apuesta a imponerse sobre la lista de La Libertad Avanza
Por su parte, la provincia de Salta, fue a las urnas para votar 30 diputados y 12 senadores provinciales, 121 concejales y 232 convencionales municipales.
Si bien aún no están los resultados, el oficialismo de Gustavo Sáenz se enfrenta a La Libertad Avanza, que quiere adquirir el lugar de primera oposición.
En el Gobierno no se sienten tan confiados por los resultados en Salta, a diferencia de la postura que tiene en Jujuy y Chaco.
La jornada electoral se desarrolló en medio de acusaciones cruzadas entre el oficialismo y La Libertad Avanza.
Desde el partido libertario denunciaron “graves irregularidades y clientelismo”. En el comunicado oficial, expresaron: “Lo que debería ser una jornada democrática transparente y legítima, se ha convertido en un escenario atravesado por la improvisación, el manejo irresponsable y una intención evidente de desalentar la participación ciudadana”.
Además, agregaron: “Estos hechos no son aislados ni casuales. Responden a un patrón sistemático que apunta a entorpecer el ejercicio pleno del derecho al voto y dinamitar los principios fundamentales de cualquier república democrática”.
