Caso Cecilia: semana crucial para el proceso a dos años del femicidio
El asesinato impactó a toda la provincia y al país. Se generan expectativas por las últimas audiencias preliminares.
Una imagen difusa de una cámara fue el último registro gráfico de su vida. Hace dos años, Cecilia Strzyzowski fue captada por dicho dispositivo al ingresar a una vivienda ubicada en calle Santa María de Oro al 1460, de la que no regresó jamás, al menos no por sus propios medios. Eran aproximadamente las nueve de la mañana cuando llegó junto a su esposo, César Sena, a la casa de sus suegros, el influyente matrimonio de dirigentes piqueteros y políticos vinculados al oficialismo de aquel entonces, Emerenciano Sena y Marcela Acuña. La secuencia algo borrosa capturada por una cámara situada en la acera frente al inmueble se transformó en una prueba clave.
La investigación concluyó que Cecilia fue asesinada ese mismo día por su pareja, César, y que sus padres, Emerenciano y Marcela, desempeñaron un papel fundamental como cómplices necesarios. Cuatro colaboradores del núcleo familiar: Gustavo Obregón, Gustavo Melgarejo, Fabiana González y Griselda Reinoso se implicaron en diferentes funciones en el encubrimiento del crimen, limpieza de la escena y, hasta en la desaparición del cuerpo de la joven. Este hecho conmocionó a la provincia en plena campaña electoral y movilizó a la sociedad, convirtiéndose en el tema principal de conversación durante casi dos meses.
La madre, la hermana y la abuela de Cecilia se convirtieron en símbolos de la lucha por justicia, un proceso que llega a su segundo aniversario y que en las últimas semanas ha dado pasos significativos hacia un juicio histórico.
LO QUE SE AVECINA
El martes 3, un día después del aniversario, tendrá lugar la tercera audiencia preliminar en la Cámara Segunda en lo Criminal. En las dos audiencias anteriores, la jueza Dolly Fernández resolvió, entre otras cuestiones, que el juicio por jurados se llevará a cabo en Resistencia, rechazando la solicitud de uno de los acusados.
Esta semana,se prevé que cada parte presente su teoría del caso. En esa línea, cobra fuerza la versión de un posible pacto dentro del clan Sena, sugiriendo que César podría asumir la responsabilidad del asesinato de su esposa, buscando eximir a sus padres, Emerenciano y Marcela Acuña, de cualquier participación. Esto, según las defensas, debería cambiar drásticamente el rumbo del caso. No obstante, los fiscales y las querellas sostendrán con firmeza que los padres fueron cómplices necesarios para que su hijo llevara a cabo el crimen.
