Alerta por el aumento de casos de tos convulsa: siete muertes infantiles por falta de vacunación
El aumento de casos de tos convulsa —o coqueluche— encendió las alarmas sanitarias en el país, donde siete niños menores de dos años fallecieron en lo que va del año. El repunte expone la caída en las coberturas de vacunación y golpea con mayor fuerza a los bebés que aún no completaron su esquema.
Cuatro de los niños que murieron tenían menos de seis meses; otro tenía entre seis y once meses, y los dos restantes entre uno y dos años. Ninguno contaba con el esquema de vacunación completo, un patrón que se repite en los cuadros más severos.
El último Boletín Epidemiológico Nacional confirmó 627 casos y 4.825 sospechosos, con circulación de la enfermedad en 19 provincias. Las regiones Centro —impulsada por el aumento en la provincia de Buenos Aires— y Sur concentran la mayor cantidad de casos. Tierra del Fuego registra la tasa más alta por población debido a un brote reciente.
Las autoridades sanitarias apuntaron que el avance de la enfermedad se relaciona directamente con las jurisdicciones donde los refuerzos obligatorios muestran los niveles más bajos. Desde el Ministerio de Salud reiteraron que la vacunación “es gratuita, segura y obligatoria”, según recordó Claudia Rodríguez, directora de Epidemiología y Medicina Tropical.
El caso que encendió la alarma en Ushuaia
Uno de los episodios más comentados ocurrió en Ushuaia, donde una niña de dos años ingresó al hospital con síntomas de bronquiolitis y terminó internada en terapia intensiva ante la sospecha de una patología hematológica. Un estudio molecular confirmó posteriormente que se trataba de coqueluche. La menor no estaba vacunada. Aunque evolucionó favorablemente, el caso evidenció el riesgo que implica la falta de inmunización.
Tierra del Fuego acumula 128 contagios confirmados. Según los equipos de salud locales, el brote se originó en un caso adulto y se expandió rápidamente entre contactos familiares, escolares y trabajadores de la salud.
En hospitales pediátricos advierten que las cifras oficiales podrían no reflejar la verdadera magnitud. “Lo que se registra es solo la punta del iceberg”, explicó Guadalupe Pérez, jefa de clínica de epidemiología del Hospital Garrahan, al señalar que muchos convivientes de pacientes positivos presentan síntomas pero no consultan.
Cómo se transmite y por qué afecta más a los bebés
El coqueluche es una infección bacteriana altamente contagiosa que se transmite a través de gotas respiratorias. La enfermedad comienza con síntomas similares a un resfrío —congestión, fiebre baja y lagrimeo— y progresa hacia crisis de tos violenta, a veces acompañadas de vómitos, episodios de ahogo y agotamiento.
Los bebés menores de un año son los más vulnerables porque dependen de la vacunación materna durante el embarazo para estar protegidos hasta recibir sus primeras dosis.
El esquema de vacunación obligatorio
El Calendario Nacional de Vacunación incluye:
Tres dosis en el primer año: a los 2, 4 y 6 meses (quintuple).
Refuerzos: a los 15 y 18 meses (quintuple), a los 5 años (triple bacteriana celular) y a los 11 (triple bacteriana acelular).
Embarazadas: una dosis de triple bacteriana acelular desde la semana 20.
Personal de salud: refuerzo cada cinco años si trabaja con bebés menores de un año.
Además, las autoridades recomiendan mantener las medidas de prevención: lavado frecuente de manos, uso de alcohol en gel, barbijo en caso de síntomas y consulta médica ante tos persistente por más de 14 días. Cuando se detecta a tiempo, el tratamiento es simple y consiste en cinco días de antibióticos y aislamiento domiciliario.
