Sociedad 

A 49 años de la Noche de los Lápices

Cada 16 de septiembre Argentina recuerda uno de los episodios más trágicos de la última dictadura militar: la Noche de los Lápices. En 1976, un grupo de estudiantes secundarios de La Plata fue secuestrado por las fuerzas represivas tras reclamar la restitución del boleto estudiantil, beneficio que había sido otorgado en 1975 durante el gobierno de Isabel Perón y luego anulado por el golpe militar.

Los jóvenes, de entre 16 y 18 años, buscaban no solo recuperar esa medida de alivio para sus familias, sino también expresar su descontento frente a un contexto de creciente represión. La respuesta del régimen fue el secuestro ilegal de varios de ellos durante la madrugada del 16 de septiembre, en un operativo que dejó desaparecidos y sobrevivientes marcados por la tortura en centros clandestinos.

Este hecho se transformó en un símbolo de la represión a la juventud y del intento de acallar cualquier forma de organización o pensamiento crítico en aquellos años. Apenas unos pocos lograron sobrevivir; la mayoría permanece desaparecida o fue asesinada.

En marzo de 2024, la Justicia dictó condenas a responsables militares, policiales y de inteligencia que participaron en este operativo, en el marco de los juicios por delitos de lesa humanidad.

La Noche de los Lápices sigue siendo, 49 años después, un recordatorio de la violencia estatal y de la importancia de la memoria para que estas violaciones a los derechos humanos no vuelvan a repetirse.

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